lunes, 18 de abril de 2011

Si me llaman vago


Extracto de un texto publicado en la revista Ekintza Zuzena nº 22, aunque lo he leído en el libro "Consumir menos vivir mejor"

(...) Si me llaman vago porque creo que el dinero es la zanahoria
que utilizan para tenernos tirando como borricos
de la noria mientras nos damos coces para no quedarnos
paraos y sin zanahoria y dando mordiscos y abriéndonos paso
a codazos para correr detrás de ella y me gustaría no ser tan
borrico (con perdón de los borricos), pues lo digo sin rodeos...
lo soy.

(...) Si me llaman vago porque me gusta escribir, escuchar,
hablar, leer, jugar, cantar, componer, hacer-ver teatro-cine,
pintar, hacer el amor... y creo que queda muy poco tiempo
para hacer estas cosas porque estamos todo el día trabajando,
estudiando o haciendo lo que sea para buscar trabajo,
ya es que no sé como decírselo... soy vago.

(...) Si me llaman vago porque creo que en una sociedad libertaria,
sin burocracia, produciendo lo estrictamente necesario
y dejándonos de vaciar tiempo produciendo
cantidad de armatostes estúpidos, y con el mogollón de
peña que somos y lo que producen las máquinas, que para
eso están, iban a sobrar horas por todos los sitios, pues miren,
soy vago ¿no lo voy a ser?

Me voy a la cama, ¿vienes?

miércoles, 6 de abril de 2011

Sonrisas!


Como quien vomita un bocadillo en mal estado, necesité expresar de esa manera lo que en esos días sentía y como muy bien han comentado, no debería echar la culpa al exterior de lo que yo siento dentro. Hoy quiero re-comenzar a escribir con el espíritu con el que comencé este blog en breves hará un año.

Como quien regala rosas anónimas o sonrisas a desconocidos, plantando una chispa de amor en el corazón del destinatario, quiero seguir buscando en lo bonito de la vida para a través de este espacio tratar de plantar pequeñas semillas venenosas de sonrisas, cariños, buenos rollos y amor, aportando mi gota de suavizante a los calcetines y las bragas de esta lavadora.

No prometo falta de tropiezos, ni que quizás algún día no ande cabiz bajo, pero sí prometo que será algo pasajero para volver a mirar al cielo en esa búsqueda de un sentir mejor general y no individual, caminando con el resto hacia un mundo más libre.

Gracias por los comentarios, si algún día necesitas de mí, házmelo saber... sin miedos!

La primavera ha venido, démosle la bienvenida.